AMBIENTADOR PARA CASA
Cuando pensamos en el mejor ambientador para casa, lo primero que nos viene a la cabeza es la imagen de pequeños dispositivos enchufables o frasquitos con aceites que más pronto que tarde quedan relegados a las profundidades de algún cajón en nuestra vivienda.

Por otro lado, tradicionalmente se ha asociado el uso de los ambientadores en el hogar con la ocultación o enmascaramiento de malos olores de humedades, comida, ropa sucia o para su utilización en ambientes cerrados. Pero utilizar ambientadores de hogar supone mucho más. Si quieres, te ayudamos a averiguar cual es el mejor ambientador natural para casa.
Seguramente habrás oído que multitud de comercios y negocios recurren cada vez más a la ambientación de sus espacios para evocar sensaciones, crear ambiente, transmitir valores y sensación de pertenencia. Esto es especialmente crítico cuando hablamos de ambientadores para tiendas. Esta ambientación se realiza recurriendo a nuestros sentidos para generar una experiencia de compra que vaya más allá de la mera adquisición de un bien o servicio y juega con la música (o el silencio), las luces, el mobiliario y, lo habrás adivinado, los olores. Cada vez de forma más frecuente, se trata al olfato como a uno de los sentidos que nos hacen conectar de forma más intensa con nuestro yo interior.
La utilización de diferentes aromas para la generación de sensaciones no está necesariamente restringida al ámbito profesional y puedes hacer de la misma un nuevo elemento de tu hogar.
Aromaterapia.
¿Sabes ya cual es el mejor ambientador para casa? A lo largo de la historia se han utilizado los vapores de aceites esenciales de multitud de plantas y las fragancias que estos generaban como herramienta para el tratamiento de enfermedades del cuerpo y la mente. La ciencia detrás de tales aceites no ha cambiado en siglos, así como tampoco su utilidad para lograr la relajación de cuerpo y mente, concentración o simplemente alegrar el espíritu o abrir el apetito.
Ahora podemos llevar los beneficios de esta práctica a nuestro hogar gracias a la gran variedad de aromas disponibles. Siempre con estricta sujeción a las instrucciones que nos den los médicos y terapeutas con respecto a nuestras necesidades, la utilización de un ambientador de hogar puede ayudarnos a alejar el estrés e incluso la ansiedad, problemas digestivos menores o problemas de piel. Si bien se trata de ayudar en el tratamiento de enfermedades menores, también se recurre a ellos para el tratamiento del estrés generado en enfermos con patologías más graves.
Además, una vez que integremos la utilización de distintos aromas de nuestra elección en nuestra vida diaria, éstos pueden hacernos lograr, incluso, un mejor descanso. Aromas como el de la lavanda o el mandarina pueden, utilizados en nuestro hogar a lo largo del día, contribuir a generar las condiciones más propicias para recuperar el sueño reparador.
Memoria olfativa
Todos, en alguna ocasión, hemos evocado alguna vivencia del pasado después de percibir un olor. Los ejemplos son innumerables. El olor de la lavanda nos transporta inmediatamente a la casa de nuestros abuelos. El pino nos hace volver a aquel viaje a la montaña que casi habíamos olvidado.
Esta evocación es lo que se conoce como memoria olfativa. Distintos olores pasan a ser, de esta forma, percepciones y estímulos físicos que, por medio del sentido del olfato generan una sensación entendida como respuesta a esos estímulos. Cuando se da la asociación de una sensación olfativa con una emoción, como la seguridad de la familia o la libertad del reencuentro con la naturaleza, se produce la generación de un recuerdo.
Es así como el sentido del olfato se encuentra conectado con las emociones, haciendo posible que a través del uso de un ambientador natural para casa o de un ambientador para armarios se ayude a la generación de recuerdos entre los miembros de nuestra familia.
Otra cara de la memoria olfativa es el olvido, la pérdida de sensibilidad a determinados olores con la exposición prologada a los mismos. Nuestra memoria olfativa tiende a descartar olores persistentes en nuestro entorno, lo que puede hacernos insensibles a malos olores que, por el contrario, sorprendan negativamente a los visitantes que podamos recibir en nuestro hogar. La utilización de diferentes fragancias a lo largo del año nos mantendrá conscientes de las sensaciones olfativas que hay en nuestra vivienda agradando al mismo tiempo a las posibles visitas.
Teletrabajo.
La cada vez más extensa implantación del tele trabajo ha hecho que muchos de nosotros descubramos de nuevo nuestra vivienda. A la necesidad de disponer de un espacio adecuado para la realización de nuestras tareas profesionales, con la luz adecuada y apropiado ergonómicamente, hay que añadir otros factores como, lo habrás adivinado, el olfativo. De la misma forma que no instalaríamos nuestra oficina en el cuarto de la lavadora ni en el garaje, por ser ruidosos y oscuros, debemos procurar que el emplazamiento de nuestra oficina reúna las condiciones adecuadas. Por ello necesitaremos un ambientador para oficina.
Aquí es donde la utilización de un ambientador que huela en toda la casa puede marcar la diferencia, sobre todo en dos puntos: lograr una mayor concentración y conseguir ahuyentar el estrés laboral.
Una ventaja adicional de la utilización de diferentes fragancias en nuestro ambientador para la casa es la posibilidad de diferenciar momentos y franjas horarias. La utilización de una fragancia de concentración por la mañana y de una que favorezca la relajación al caer la tarde nos ayudará a conseguir un punto extra de confort para desarrollar nuestro trabajo desde casa.
Decoración.
Ya hemos visto las ventajas de la utilización de ambientadores de hogar tanto para nuestra salud como para nuestro trabajo. No podemos pasar por alto el potencial de los aromas naturales como complemento a la decoración de nuestro hogar.
La utilización de fragancias variadas en cada habitación, también con ambientador para armarios, nos permitirá diferenciarlos y dar personalidad a cada espacio produciendo sensaciones más allá de las que conseguimos con la luz, telas, cuadros o muebles.
Pero las posibilidades de los mejores ambientadores para casa no se limitan a tu vivienda. También tu comunidad de vecinos puede sorprender a habitantes y visitantes con un nuevo aroma cada temporada, ¡una nueva señal de que has llegado a casa!