LA INFLUENCIA DEL OLOR SOBRE LA MEMORIA

Los sentidos juegan un papel clave en las percepciones de los consumidores y ejercen una poderosa influencia sobre las decisiones de compra. En este sentido, cada vez más marcas buscan integrar los sentidos en sus estrategias. Hoy en día, el marketing sensorial es reconocido como una herramienta esencial para fortalecer la conexión entre la marca y el consumidor al estimular todos los sentidos y generar emociones. Pero, ¿qué papel desempeña la memoria olfativa?

MEMORIA OLFATIVA Y EMOCIÓN

Los neurólogos han identificado una fuerte conexión entre el olfato y la memoria. Existe una ruta neural fuerte entre el núcleo olfativo anterior del cerebro y el hipocampo, que es el área del cerebro responsable de crear nuevos recuerdos, lo que explica, hasta cierto punto, por qué la pérdida del sentido del olfato es uno de los primeros síntomas del Alzheimer.

Cuando olemos algo, el olor viaja por la nariz, a través de la amígdala (que es responsable de muchas de nuestras emociones), y el hipocampo, antes de llegar al tálamo (que procesa las señales sensoriales). Eso significa que todo lo que olemos pasa por las partes de la emoción y la memoria del cerebro antes de que podamos olerlo. De este modo, nuestra memoria olfativa es realmente poderosa.

Según Jaime Bettencourt, vicepresidente senior de gestión de cuentas y desarrollo de negocios en Mood Media (una empresa que estudia la creación de conexiones emocionales entre marcas y consumidores) de todos los sentidos, el olor es el desencadenante más poderoso de la emoción y la memoria, ya que las personas tienen 100 veces más probabilidades de recordar algo que huelen sobre algo que oyen, tocan o ven”. De ahí, la importancia de la memoria olfativa en el ámbito del marketing.

EL IMPACTO DE LA MEMORIA OLFATIVA EN EL CONSUMIDOR

Varios estudios científicos han confirmado la posibilidad de crear una asociación duradera entre un olor y un estado de ánimo específico, para recordarlo incluso después de mucho tiempo.

Marcel Proust en su novela “En busca del tiempo perdido” también resaltó el papel de la memoria olfativa al afirmar que lo que queda de nuestro pasado son olores, que son inmateriales e impalpables, pero no menos intensos, persistentes y fieles. Por esta razón, las fragancias serían las únicas en soportar la inmensa estructura del recuerdo y traer de vuelta los eventos pasados.

Sin embargo, un equipo de investigadores británicos dirigido por el neurólogo Jay Gottfried se preguntó si el mismo condicionamiento funcionaría en la dirección opuesta, es decir, si los recuerdos eran capaces de recordar un olor.

En investigación sobre la memoria olfativa, Gottfried le pidió a un grupo de voluntarios que emparejaran diferentes imágenes con olores específicos. Más tarde, las mismas imágenes ya almacenadas por el cerebro se mostraron por segunda vez a los voluntarios sin el estímulo olfativo. Incluso sin olores, su corteza olfativa piriforme se reactivó, confirmando las expectativas de los investigadores.

LA MEMORIA OLFATIVA DE UN NEGOCIO

Al combinar la evidencia de estos estudios con nuestra experiencia personal, es fácil comprender la importancia de la memoria olfativa para mejorar una marca y hacerla reconocible y memorable. Deja que te ayudemos a crear tu odotipo ideal.